LA DIETA VEGETARIANA

Dieta vegetariana y actitudes correctas pueden sanarte”

¡Hay grandes deportistas vegetarianos! Navratilova, Carl Lewis, Van Damme…

Una opción moral.se puede vivir sanamente sin comer nada de origen animal. Ni huevos ni lácteos. Quien quiera comer carne o pescado… que mate personalmente al animal.

Los grandes primates son vegetarianos, y los humanos comíamos carne y pescado ocasionalmente. ¡Hoy se comen en exceso! El organismo se sobrecarga, y de ahí nuestras enfermedades: articulaciones inflamadas, arterias bloqueadas, alergias, diabetes…qué tiene de malo el pescado?
Su grasa se satura de metales pesados y tóxicos, dada la contaminación de los mares.Los vegetales llevan agrotóxicos…
Peor es que carne y pescado carguen con la vibración de sufrimiento y miedo del animal. Aconsejo, eso sí, el cultivo biológico.¿ aburre comer sólo vegetales?
El ser humano puede ser crudívoro:  los vegetales que se  ingieren  crudos, frescos, vivos. ¡Ayudan a las células a renovarse! Como ensaladas variadas, muchas frutas… la proteína?La de los cereales , ¡no necesitamos más! Se exagera con las proteínas.

 la medicina convencional sólo pone parches. Sirve para el remedio drástico, urgente…, pero superficial: ¡no cura de verdad!

Sólo te curas de verdad desde dentro de ti mismo. El buen médico es el que sabe despertar a tu médico interior, ¡que es el único que podrá sanarte de verdad!

Hay un médico dentro de mí?
Sí. Todas las enfermedades de tu cuerpo tienen raíz anímica, espiritual. Si te ayudo a descubrir esa causa espiritual…, ¡se sana tu psique, y eso sanará tu cuerpo!

Medicina holística, suma de medicina psicosomática y medicina natural son el mejor remedio , disfunciones visuales, alérgicas, dérmicas, reumáticas, artríticas, anímicas…  dieta vegetariana y un cambio de actitudes.

¿Actitudes?
Los pensamientos, las palabras y los actos ¡son muy poderosos y pueden hacer enfermar tu cuerpo! Sanando actitudes -ideas, palabras, hábitos…- sana el cuerpo.

¿Qué más necesitaría para lograrlo?
Alegrías. Y, sobre todo, una fortísima motivación: ¡sin eso no hay dieta vegetariana que valga! El ojo acaba por reflejar tu claridad interior. Y brillará más.

Vegetarianismo y espíritu, salud psicofísica… ¿Cuál es su conclusión, su máxima?
Ama a la naturaleza. Ama a la vida. Ámate a ti mismo, ama a todos. Y todo lo que hagas contra las leyes del amor te enfermará. ¡Nada hay más curativo que el amor!